Me está costando escribir en estos días. Volvimos de la playa y aterrizamos en un Bilbao en fiestas. Uno sigue queriendo respirar algo del ambiente nocturno… sin descuidar sus obligaciones como padre. Así que prácticamente todos los días recogimiento monacal después de los fuegos artificiales. Sublimo cámara en mano redescubriendo el punto más estético de las actividades más infantiles: gigantes y cabezudos, toro de fuego, gargantua, marijaia,…
Para quien no conoce las fiestas de Bilbao me sería difícil explicar nada que os ayudase a acercaros a la realidad. Supongo que hay mucho compartido con otras celebraciones en otros lugares. Quizás una diferencia sustancial puede ser la importancia central de las konparsas en la organización y dinamización de estos días. Hay muchas opiniones sobre este punto. Más allá de las que buscan acentuar las tensiones entre diferentes visiones de la fiesta yo rescato la diversidad y canal de participación que aportan.
No sé cuantas cosas me llevan a pensar en paralelo, como flotando por mis experiencias, pero es algo que no puedo evitar. En estos días vuelvo a hincar rodilla en los espacios que nos sirven de encuentro. Y parto de un lugar, en teoría, absolutamente contrario. Escuchaba el pregón con el que abrimos las fiestas. En esta ocasión en manos de Joseba Solozabal. Parece que no ha gustado a nadie.
Metía el dedo en el ojo de un montón de personas ancladas en su manera de entender y vivir estos días, y el resto claro. Y sin embargo mi sensación es que esta manera de ejercer su personaje, tan trasgresora (bueno, no es para tanto pero vivimos en un lugar muy tradicionalista hasta en los sectores que se siguen considerando vanguardia), le sitúa en un lugar muy propicio para servir de eslabón de cadenas muy alejadas entre sí. Así me lo confirmaba Ander, un buen compañero de «batallas».
Enfundándome (cada vez me cuesta más, quizás debía de escribir embutiéndome) en mi camiseta de konparsero (Mi lugar en esta aventura está en “sinkuartel”. Hace años que no colaboró apenas y a pesar de esto y de la cantidad de personas nuevas que se han sumado al lugar sigue siendo el mío, dónde me encuentro a muchas personas que quiero, dónde mejor sirven los tragos, el único bocadillo con dátiles, música excepcional,…) cruzo una línea que suelo intentar romper a lo largo del año. Me alineo y defino en un lugar dónde el “y tú de quién eres es” es tan habitual y a veces dramático.
Y ahora me veis enfundado en mi camiseta sin mangas, escuchando el pregón o cambiando de ambiente en una ciudad que explota en actividad en todos sus sentidos; musical, político,…
A mí me cuesta encontrar un lugar al que pertenecer 100%. La sensación es la de no pertenecer, la de encontrarme un poco en los limites,… y eso me hace tolerar diferencias y encontrarme con otras realidades como quien busca un lugar dónde sentarse más cómodo.
Hace unas semanas leía o escuchaba algo sobre que la innovación siempre se encuentra en las fronteras. (Corrí a cortar buenrollismo puntualizando que la capacidad de decidir y el poder seguían en el centro). Algo hemos reflexionado ya sobre la importancia de incluir posiciones críticas en la organización como palanca de cambio. Una de las ideas de Bert Hellinger más interesantes es la de comenzar a trabajar siempre desde la situación de las personas más excluidas por el sistema.
Para variar sigo mezclando ideas. Resumiendo mi tesis de hoy y que comparto con vosotros y vosotras es; las personas que a priori no se sienten a gusto en ningún lugar tienen un potencial enorme para servir nexo entre realidades que de otra manera no se encontrarían. La insatisfacción como motor de cambio y encuentro.
Bueno.Para ser Agosto no está mal en profundidades, ¿no? Es que creo que para esto abrí el blog. Para compartir reflexiones que en otros lugares y en otros tiempos no serían escuchadas. Un abrazo veraniego.
5 comentarios para “En todos los sitios y en ninguno. Potencial para el encuentro”
Edu
Es cierto, coincido, es complicado explicar lo que son las fiestas de Bilbao a alguien que no ha estado. Me he cansado de intentar explicarlas, que siempre que viene un colega de fuera flipa. Puede ser bilbainismo, puede que sea la realidad.
Creo que mejor me voy a la cama. Otras fiestas sin ligar. A mi el que me venga con la chorrada de que en Aste Nagusia se folla, quizás le parta la cara.
Edu
Totalmente de acuerdo con lo del pregón. En este caso el ir de transgresor ha sido lo más esperable. Y quizás lo menos transgresor. Punto negativo para el que me dice como debo vivir las fiestas, y punto negativo para el que va de antipolítico/a en las fiestas y suelta un pregón así… Ya sabemos como funciona el tema de la doble moral en Bilbo, no? Lo mismo de siempre, chusco, esperable, rancio y encorsetado. Dejo mis divagaciones de borracho, que creo que es hora de planchar oreja. Un saludo a todos, ta Gora Mari Jaia!!!
Para los recién llegados, este es el pregón, siento tener que poner un video que empieza con toda la corte, pero no encuentro el íntegro:
Edu
Me he dado cuenta de que en el video que he mandado no se entiende nada… aquí uno que se entiende muchísimo mejor:
Edu
decir que no se puede hacer política, es hacer política, no??? o eso, o estoy tonto. Además del resto de chorradas que dice. Menos mal que la mayoría de bilbainos son listos (bilbainada al canto) y se han dado cuenta de la farsa esta…
asiergallastegi
Querido Edu.
De tus aportaciones algunas reflexiones. Cuando navegas dejas rastro y el de esta mañana gaupasera (sin dormir para quienes no manejen el termino) te descubre apasionado, hiperactivo, cariñoso, bilbaino, casto por esta noche y alguna cosa más. ;D
Ya pusé el enlace al pregon pero se agradece la colaboración.
Tu testimonio si es el de una persona que exprime la noche. Yo dejé a mis amigos para acostar a Maren y poder salir de mañana tras los cabezudos, je.
Sobre no politizar, basicamente de acuerdo en la medida que es un objetivo absolutamente imposible en esta parte del mundo y plantear la despolitización de las fiestas una quimera y un posicionamiento a la vez.
Ví el otro día a Josebita en su programa (un share brutal en estas fechas) con el equipo de concejales de Bilbao y les tiraba de la oreja por no haber asistido al txupinazo a parte del elenco. Bueno, sobre todo me gusto verlos a todos convocados por el personaje y como escuchaban algunas cosas que me parecían, cuando menos sugerentes (incompletas pero recogiendo el espiritu del post seguramente las que podían ser en el momento y lugar)
Un abrazo