Transparencia y buen gobierno

Voy a ver si le encuentro a este blog otra utilidad. Por ejemplo guardar cuatro apuntes de una jornada. De paso las comparto y quién sabe que pueda pasar.

La semana pasada participé en el seminario organizado entre Fundación EDE y Fundación Luis Vives sobre “Trasparencia y la rendición de cuentas en el Tercer Sector”.

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Se trata del quinto tema en el que profundizan desde los foros del tercer sector en Luis Vives. Espacios de debate dónde reúnen a personas expertas en un tema y lo exprimen hasta generar un material que publican y luego socializan y contrastan en diferentes seminarios. Una propuesta más que interesante.

Aviso que no pude quedarme hasta el final y no os puedo transmitir el resultado del trabajo me conformaré con esas cuatro ideas más introductorias y certeras.

Comenzaban realizando un truco de magia con cartas para cuestionar la idea de transparencia. Hay muchas maneras de mostrar las cartas. A mí que me cuestionen el tema a tratar me gusta más que inquietarme. ;D

Aportaban datos que eran espectaculares. En 1965 existían en España 495 organizaciones no lucrativas registradas, en 2002 ya eran 260.092. No hay nada como la libertad de libre asociación… Aunque algunos pensareis, acertando, que la actividad sociopolítica en “negro” era en los sesenta muy importante en forma y número. De todas formas significativo.

Traían un nuevo concepto para seguir profundizando: ACCOUNTABILITY. Entendiendo que es un concepto que une las ideas de transparencia y rendición de cuentas. Yo lo percibí como una actitud, un compromiso contraído con la comunicación de los detalles de la gestión del dinero, de las actividades realizadas y la organización interna de las entidades.

El facilitador continuaba explicando lo que para él era algo que solo ocurría en este sector; un escándalo en una entidad salpica a todos. Una compañera ya se encargo de recordar que eso ocurría en otros sectores –puso como ejemplo los bancos pero quizás no era acertado librar de sospecha a este sector-.

Cuando hablamos de opacidad y escándalo varios miraban a la persona delegada desde Anesvad. Espero que fuera saliendo del marcaje. Me constan los esfuerzos de esta organización por coger nuevos rumbos, conozco a una de las nuevas tripulantes y solo puedo hablar maravillas de ella. Animo!!

Escuchaba que desde el tercer sector no se cuida la comunicación, la imagen, la marca… Yo pienso que, la de este sector, es una actividad que se basa en el vinculo, en la confianza, en la relación,… que los proyectos que se dinamizan desde las ONL son producto de acuerdos entre diferentes buscando un mismo objetivo. Administración pública, las cajas, empresas privadas, voluntariado, profesionales, entidades sin ánimo de lucro,… Esta apuesta por la transparencia podría reforzar esta confianza y ayudaría a llegar mejor y más alto desde redes más extensas y fuertes.

De nuevo se discutía sobre la necesidad de explicar más aun la gestión de servicios públicos por parte de la iniciativa privada sin ánimo de lucro. Igual es una necesidad en otros lugares pero yo creo que en la CAPV esto es una realidad y habrá que tener cuidado porque no deje de ser natural. Aquí a veces la discusión está en la imagen compartida o no de algunas puertas. En otros sectores lo tienen mucho más claro; la plaza de mi barrio lleva un año en obras y en el cartel con el logotipo del ayuntamiento también se lee el de la empresa constructora.

Por supuesto esta y cuantas herramientas se quieran poner para la mejora de los servicios cuesta dinero y tiempo. La necesidad de estructura cada vez es mayor y las organizaciones medianas-grandes están más preparadas para competir por los servicios. Si ya habéis leído mi blog sabréis de mi apuesta por los ultramarinos y su servicio frente a los centros comerciales. En cómo se estructure la formalización de este sector también se juega nuestro bienestar (el de todos, no solo el de las personas más rotas)

Presentaron un modelo de evaluación de la transparencia y el buen gobierno que está desarrollando la coordinadora de ongs para el desarrollo. Me pareció un trabajo realmente interesante por los ejemplos que compartieron. El debate, realmente apasionante, es si es necesario e interesante estratégicamente diseñar “varas de medir a medida” o es mejor optar por medir la eficiencia de estas organizaciones –ya de por sí con cierta imagen de “caballitos blancos” y gestión “boysocut”- desde parámetros más compartidos y standarizados como ISOs,…

Conozco algo de alguna otra herramienta que aborda estas necesidades desde lugares similares como la auditoria social que promueven los amigos de REAS.

Me marche después de un debate que para mí solo es la punta de un iceberg en el que habrá que bucear; La RSC de las organizaciones sin ánimo de lucro. Siempre que impactas tienes que ser socialmente responsable.

sustraiak by gallas
sustraiak by gallas

Yo no puedo más que situarme en este fuera-dentro tan característico en mí. Me tocó estar unos años pensando en este tipo de cosas desde la perspectiva de supervivencia de una entidad y sé lo que se esta jugando en estas propuestas. Desde dónde hoy estoy me resuenan algunas ideas de mi amigo Fernando de la Riva queriendo volver a los origenes del asociacionismo y situar a la gestión desde la iniciativa privada sin animo de lucro en un lugar que no lo ocupe todo. En la opción por la gestión nos jugamos mucho, hay mucho de potencial y mucho de riesgo.

Nuestro amigo Pedro Beitia de Fundación EDE y otra gente podrán contarnos algo más de lo que sucedió por allí. Hasta aquí mi crónica.

11 comentarios para “Transparencia y buen gobierno”

  1. Paul

    Uy, tema bastante importante en el que he estado pensando. Por ejemplo, nuestros presupuestos son públicos y las decisiones sobre temas de financiación las tomamos en Asamblea, pero ¿no tendrían derecho los socios y colaboradores a saber qué es lo que gano? ¿o cuánto cuesta una determinada inicitiva? ¿o qué instituciones nos dan subvenciones? Pienso que tendría un efecto positivo. Los socios sabrían dónde se invierte su dinero y qué resultados se consiguen. El aumento de información genera más implicación, sin duda, pero ¿todo debe ser transparente o algo debe quedar en la discrecion?

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    • asiergallastegi

      Yo creo que en la acción politica también debería de regir algun tipo de norma parecida a la «pertinencia». Creo que hay cosas que contarlas solo hace ruido. El principio de mucha información a unos pocos y poca información a muchos, tomada de procesos participativos me parece sugerente. Al que quiera toda (o mucha información) puertas abiertas, no hay nada que tengamos que ocultar. Y llegar hasta el más ajeno a nosotros/as para contarle en que andamos y como lo hacemos de una menra digerida y sencilla. No tengo dudas de que lokarri es un ejemplo de buena practica en lo que transparencia y buen gobierno se refiere. Un abrazo enorme

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  2. Fernando de la Riva

    Pues si, amigo Gallas, me tiene un poco harto que en los foros del «sector» se hable tanto de economía (¡con términos ingleses!¡me caging en su padring!), de eficacia y eficiencia, y se hable menos -pero mucho menos- de transformación, compromiso, valores, participación…
    Tengo claro que necesitamos nuevas categorías, que hay organizaciones sociales que solo se diferencian de las empresas porque no tienen «ánimo de lucro» (¿o si?¿o existen acaso otras formas de «lucro» que no son solo el «reparto de beneficios»?) y ese es el único «valor» que les diferencia.
    Creo que son estructuras funcionales al sistema, cómplices de las «cosas como son».
    No son esas las que van a construir Otro Mundo Posible.
    ¿Y las «otras»? ¿Donde están, cómo son? ¿Cuando hablamos de ellas?
    Un abrazo

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    • asiergallastegi

      Hablo desde el barro asi que mis palabras tendrán que ver con muchas cosas. Creo de verdad que hay un valor añadido y profesionales comprometidos que quieren y son en alguna medida palanca de cambio. Me doy de golpes con el monstruo guerradecifgrasyestadisticascortoplazistasparainteresespartidistas.
      Y a veces recuerdo la militancia y no siento tanta diferencia ni con la gestión desde las ONL ni con la acción desde partidos. Las luces las encuentro en las personas y su capacidad para generar cosas bonitas, luces, en algun caso -puede que infrautilizado- gritos,…
      Se acerca nuestro reto y tenemos que ponernos las pilas. Recopilo provocaciones y te las envio. Hablamos esta semana. Un abrazo enorme

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      • Fernando de la Riva

        Sin duda, hay gente de puta madre, transformadora, comprometida… en muchas asociaciones, y en muchas empresas!, y hasta en las administraciones públicas!
        Menos mal.
        Pero lo que me chinga es el discurso dominante, «gestionista», mercantilista, que viene predominando en «el sector».
        Y no tanto porque no me parezca importante hablar de la «gestión de las entidades», que es muy necesario, sino porque se habla poco o nada de todo lo otro: transformación, participación, compromiso, cambio social…
        Tufo.

        (Tengo claro que se acerca nuestro reto. Y me tiemblan las piernas. Hablamos)

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    • Paul

      Vaya Fernando, comparto contigo esta afirmación. Conozco unas cuantas asociaciones que sólo están compuestas por cinco socios que deciden utilizar esa fórmula jurídica porque les es más conveniente por temas empresariales. Éstas no hacen mucho en favor de las que realmente mueven personas para conseguir un fin común.

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      • asiergallastegi

        Existe la formula de cooperativa de iniciativa social que me parece muy correcta para estas situaciones. Mi experiencia es que no esta calando en la gente. Las asociaciones -también las que gestionan- viven una situación de vulnerabilidad tan fuerte que les es realmente complicado realizar el doblesaltomortal que supone un cambio de formula juridica. Eso creo yo.

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      • Fernando de la Riva

        Paul, yo también pienso que la «fórmula jurídica», a estas alturas, no es tan importante o tan definitoria.
        Conozco «empresas» (las cooperativas de las que habla Gallas, por ejemplo), más participativas y transformadoras que muchas asociaciones.
        Conozco «asociaciones» mucho más verticales, autoritarias y «lucrativas» que muchas empresas.

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  3. asiergallastegi

    Abrazos Fernando
    Abrazos Paul
    Me gusta ver que este lugar puede ser un poco como el patio de la escuela dónde hablamos de nuestras cosas mientras los niños juegan. Además me gusta escuchar ideas-raiz. Fernando he compartido la información sobre el curso que organizais en Octubre. No voy a poder ir pero tengo necesidad de quitarme un poco de pesimismo social. Lo justo no vaya a ser que me escape al monte. Besos

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  4. Silvia_ncuentra

    La forma jurídica no hace al monge… 😉 Si fuera tan fácil, podría hacerse un decreto ley por el que cualquier agrupación de más de dos personas se rigiera por la forma jurídica del Mirlo Blanco SL.
    Y por eso se vuelve siempre a las personas. Porque de quienes tienen la autoría intelectual de la organización depende el modus operandi -y despúes, también, de las personas que la componen, claro-.
    Información, transparencia, transformación, multidireccionalidad, etc. ¿Pero cómo articular todo esto sin que nadie se dé por ofendido?
    Mi experiencia, por ejemplo, con la RSE se retrotrae a un buenísimo curso Experto postgrado en RSE y en la capacitación para implantar la SGE21, única norma española de «aseguramiento» de la RSE.
    El problema es que una norma tampoco hace al monge, pero así es como piensan la empresa que la contrata y la persona que la implanta. Norma implantada, objetivo cumplido. Y no: a la base de cualquier norma hay unos valores que no siempre están y que no se pueden transformar por arte de birlibirloque en procedimientos, políticas, manuales….
    Es necesario que las y los profesionales que trabajamos por mejorar la gestión o la organización o como se llame de cualquier (1+n) no nos creamos con los deberes cumplidos cuando aplicamos un abc alejado de las personas que habrán d continuar con la labor una vez que hayamos desaparecido…
    Vamos, que simpre se vuelve a la persona. Persona como suma de valores, actitudes, ¿aptitudes?…. En mi opinión, es más rentable trabajarse a las personas que trabajarse modelos de gestión, de «aseguramiento», de intervención.
    Ahí es nada. 😉
    (Hola Paul!)

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    • asiergallastegi

      Si. Todos son sistemas y además compuestos por personas, en un contexto muy similar y con barreras y puertas. Al debate sobre forma juridica me lleva la realidad de muchas entidades sociales que son asociación pero que realmente funcionan como cooperativa. Comparto con Fernando en que hay una especie de espejismo en el tercer sector y que mucha reflexión, dinero y energia se dirige a la parte de esta que gestiona. Además conozco algo de las dificultades que implican la gestión desde esta formula juridica, además de las que están detrás de un cambio de idem.
      Por otro lado el debate sobre modelos más extendidos o más ad-hoc es el del reconocimiento social y desde otros sectores a la actividad ligada a la intervención social. Siempre haciendo malabares para que nuestras madres entiendan en que trabajan sus hijos. Como con las madres con mucho técnico y politico.
      Pones en el centro a las personas. No puedo estar más de acuerdo como reflexión. Quizás en como abordarlo y hacer que los contextos y dinamicas sean más «humanas» sería interesante centrarnos más en las interacciones, en la comunicación entre las personas. Además del resto de factores que son parte fundamental de las organizaciones; su objetivo, cultura,…
      Pero ya sobre esto para otro post. En mi blog o en el tuyo.
      Un abrazo

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