(Absténgase de leer este post si ha trasteado de manera personal/profesional en los últimos años en esta vieja red de redes)
Esta semana he tenido varias conversaciones sobre el uso de redes sociales y otras herramientas de la, ¿todavía la podemos llamar así? web 2.0.
Acabamos allí cuando habíamos comenzando hablando de investigación abierta, un congreso internacional, una estrategia de reflexión con una red internacional de nodos sociales, la puesta en marcha de una nueva web de un buen amigo, un espacio para una noasociación vecinal y el espacio en Internet de un pequeño proyecto en colaboración.
Redes, nodos locales, estrategia, internacional, investigación abierta, comunidad,… me descubría apasionado en cada conversación. Cuando esta derivaba con más o menos fuerza en el terreno de los blogs, Facebook y compañía no me resistía. A diferencia de otros momentos dónde explicar como se abre o se cierra un espacio web me aburre soberanamente, en estas ocasiones hablábamos de las palancas para el cambio.
Eran aproximaciones sencillas pero quienes se acercaban lo hacían después de haber conectado con una necesidad y cuando íbamos navegando por experiencias y herramientas las conectaban con sus proyectos además de resoplar invadidos por semejante cantidad de información.
Voy a recoger algunas ideas sencillas como si fueran las claves de esto a lo que llegamos juntos en estos cafés, comidas, videoconferencias y reuniones.
- Centrado en necesidades y escalable. Comencemos poco a poco y por aquello que esta más cerca de nuestra necesidad. No corramos a abrir perfiles en cada red social. Si quiero compartir enlaces web en un grupo de trabajo quizás los solucionamos con un grupo en diigo y ya está.
- Curación de contenidos. Todos estos proyectos ponen en relación a profesionales, personas, organizaciones que generan y manejan información. Una manera sencilla de construir proyectos es compartir esta en algún tipo de marcador social y compartirla de manera abierta (diigo, delicious, scoopit e incluso las revista de Flipboard) Si te interesa aquí más.
- Apertura, conexiones y oportunidad a la construcción colectiva. Hay lugares dónde es especialmente complicado apostar por la producción y el compartir abierto de reflexiones e información. Por ejemplo la universidad. Yo no utilizo muchos argumentos, hablo de mi experiencia; las ideas guardadas en el cajón se quedan pequeñas, en la red crecen y vuelven llenas de matices. A mi me gusta compartir en creative commons (reconocimiento y compartir igual)
- Conversación. Cuando escribes un texto, generas una fotografía, un video y la compartes en la red dejan de estar bajo tu tutela, interactúan, se mezclan, cambian,… Parte de estas interacciones se van a dar en lugares que no conocemos. Me parece interesante tener activada algún tipo de alerta para seguir los temas que nos interesan (Google alertas, hashtag en Twitter,…) Y cuando el contraste y el dialogo se da en tu casa, lo cuidas y alimentas. Cuando el proyecto es compartido es importante consensuar una manera de estar.
- Distribuida y centralizada. Cuando escribo un post es muy sencillo conseguir que esa información se mueva en nuestros perfiles en redes sociales. Sincronizar nuestras cuentas es una tentación. Difundir nuestros posts es perfecto, de ahí a duplicar todas nuestras comunicaciones en una red en el resto no esta recomendado. La conversación sobre este post puede darse en nuestra casa/blog o en aquellos lugares dónde lo hemos difundido. Es interesante que nuestra pagina tenga un lugar dónde se puedan ver parte de esas interacciones en otras redes sociales. Si te interesa aquí más.
- Herramientas gratuitas pero no descartemos un profesional. Poner en marcha estos espacios requiere tiempo. Si disfrutas con este tipo de retos bienvenida a una aventura sin fin, si tienes amigos o amigas trasteadoras invítales a tu proyecto (hay diferentes maneras de hacer que el intercambio se viva en equilibrio) Y a veces, es perfecto pagar aun profesional que va a detectar rápidamente tu necesidad y que te va a ayudar a dar un paso más porque va a mostrarte herramientas y posibilidades que tu aun no conoces.
- Lee el mensaje del cartel que ilustra el post 😀 (Internet não é tudo, saia de casa)
Tras estas conversaciones y salvo en algún proyecto dónde pareciera que una Wiki o Google site sería especialmente atractiva, confiábamos nuestros objetivos a un blog. Un lugar dónde compartir reflexiones, hitos, proyectos,… con diferentes autores y autoras, con una periodicidad constante y a un ritmo suficiente (semanal por ejemplo), que permitiría comentarios (moderados solo en el primer comentario de cada nueva persona),…
Y además enseguida entrábamos en el segundo circulo para enriquecer el espacio. Marcadores sociales parecía importante en todos los casos. Un lugar dónde compartir documentos (directamente subidos al blog o desde algún otro contenedor de docs; Google drive, dropbox, issuu, scribd, slideshare,…), Twitter, facebook y/o linkedin (aquí encontraban mucho potencial varias personas con las que me encontraba en estos días)
Un tercer paso, sobre todo pensando en las personas y organizaciones más “textuales”/”cognitivas”, esta en el uso de material visual, sonoro y audiovisual como una manera de compartir.
Hay cuartas y quintas… Incluso alguna etapa anterior como el uso consciente de herramientas como los Grupos de Google o similares.
Prometo compartir los proyectos que cojan forma y en los que acabe enrolado. Se admiten sugerencias